Transcripción Barry Eichengreen: Tipos de cambio fijos

00:00 Soy Barry Eichengreen y vengo a hablar de los tipos de cambio fijos pasados, presentes y tal vez futuros, y en concreto sobre similitudes y diferencias entre el antiguo estándar de hace 100 años y el sistema actual del euro.

00:21 Los tipos de cambio que varían mucho pueden causar problemas, ya que pueden perturbar los flujos comerciales; si la moneda se deprecia pierde valor y eso puede provocar inflación.

00:37 Así pues, los políticos se preocupan por este fenómeno y han respondido ideando toda una serie de reglas para intentar mantener los tipos estables. Un ejemplo sería el patrón oro de finales del siglo XIX, otro ejemplo sería el Sistema monetario europeo de las décadas de 1980 y 1990. Un ejemplo extremo sería el euro, que abordó el problema de la inestabilidad del tipo de cambio eliminando los tipos de cambio.

01:05 Todos estos casos han girado en torno a un país principal: en el caso del patrón oro fue Gran Bretaña, en el del Sistema monetario europeo es Alemania y el marco alemán. El euro ha sido un esfuerzo tendente a crear un sistema simétrico sin un país central en el que todos los países sean igualmente responsables de la gobernanza, algo que no ha funcionado demasiado bien en la práctica.

01:33 Creo que lo que nos enseña esa historia es que los sistemas de tipos de cambio fijos como el patrón oro son frágiles. Esos sistemas también pueden crear problemas particulares y, en caso de una gran perturbación como que un país sufra una crisis financiera más grave que la del resto, si está atrapado en un sistema en el que no puede modificar su tipo de cambio, el banco central no puede actuar como prestamista de último recurso. No es posible recortar los tipos de interés e intentar reducir el desempleo. No es posible depreciar la moneda y potenciar la competitividad de las exportaciones.

02:15 Por eso la mayoría de los académicos creen que el patrón oro de la década de 1920 y 1930, de hecho, agravó la Gran Depresión.

02:27 Países europeos como Grecia han sufrido limitaciones similares. No han podido relajar la política monetaria, no tienen su propia política monetaria. No pueden rebajar el tipo de cambio para animar la competitividad de las exportaciones, conque no tienen salida. Y es más grave todavía que cuando los países operaban bajo el patrón oro porque el euro es más difícil de abandonar. Con el patrón oro, todavía se conservaba la divisa propia.

02:55 Creo que hay toda una serie de lecciones clave en esta experiencia histórica: si se va a aplicar un tipo de cambio fijo, hace falta una economía nacional muy flexible. La mayoría de los países no puede subir o bajar salarios y rentas de un día para otro. Hacen falta también otras políticas o mecanismos que puedan sustituir la política monetaria que falta.

03:18 Así pues, en Estados Unidos tenemos un sistema federal de impuestos y transferencias, algo que no existe en Europa. Creo que la historia muestra que se necesita un alto nivel de movilidad laboral para hacer que un tipo de cambio fijo funcione. Hay grandes flujos laborales entre estados en Estados Unidos. Europa no tiene flujos de trabajo; además en Europa hay una docena de idiomas diferentes o más.

03:46 La historia no se repite salvo si es lógico que lo haga.